Cuernavaca, Morelos.- Capacitados en siete países para realizar negociaciones, analizar información telefónica, investigar y hacer operaciones tácticas y de inteligencia, el equipo de la Unidad Especializada Contra el Secuestro y la Extorsión (UECS) de Morelos desarticuló las estructuras de Los Rojos y Guerreros Unidos, dedicados a ese delito en la entidad.
Hoy, el equipo que encabeza la fiscal antisecuestros, Adriana Pineda Fernández, detectó que La Familia Michoacana se desplazó de otra entidad para cometer dicho delito en Morelos.
En entrevista, Pineda Fernández explicó que tienen la capacidad de respuesta que permite frenar el avance de grupos delictivos procedentes del Estado de México y Guerrero, principalmente; sin embargo, los plagiarios que han sido detenidos provienen también de Sinaloa, Baja California y Sonora.
Dijo que durante la administración anterior no se contaba con una infraestructura para brindar atención y apoyo a las víctimas de ese delito, y que a partir de la creación de la UECS la cifra de secuestros bajó de 19 eventos a tres por mes.
Señala que en los últimos tres años se atendieron 344 secuestros, se detuvo a 630 personas y obtuvieron sentencias contra 340 plagiarios.
¿Qué organizaciones operan en Morelos?
—En este año hemos detectado a La Familia Michoacana. Morelos está en el centro de un conflicto. Ciudad de México, Puebla, Estado de México y Guerrero, este corredor con tantos secuestros nos pone en una situación de conflicto porque en la zona metropolitana de Cuernavaca creen que tienen un potencial económico alto.
Si se analizan las siete entidades de la región centro (Hidalgo, Tlaxcala, Puebla, Estado de México, Ciudad de México, Morelos y Guerrero), radica 37% de la población total del país y se comenten 45% de los secuestros de todo el país.
¿Los Rojos y Guerreros Unidos se dedican al secuestro en Morelos?
—Los Rojos tuvieron un auge en materia de secuestro. Había un líder y hoy le ganamos el juicio y en unos días más tendremos el número de años que será sentenciado. Era de Taxco y vino a Morelos, operó parte de 2013 y 2014, logramos su detención en mayo de 2015 en Tijuana.
En 2015 pusieron a otro líder, pero en su primer secuestro fue asegurado. Con Guerreros Unidos se trabajó para desarticular su presencia en Jiutepec y Cuernavaca. Se aseguró a los líderes, también hubo ajustes de cuentas que generaron el deceso de elementos y eso provocó su declive. A las dos las hemos desarticulado, hemos tenido ahorita una intentona de La Familia Michoacana por la región sur y otra por la de Chalco, pero los hemos contenido. Hoy hay capacidad de responder.
¿Cuántos casos han atendido de secuestro?
—Iniciamos a partir del 1 de abril de 2014, pero el trabajo previo inicia desde octubre de 2013 cuando se empieza a proyectar todo el proceso de organización. No había infraestructura para la atención de los casos, eran raquíticas las circunstancias en las que dejaron la unidad.
En 2013 cerramos con 199 personas detenidas y 150 secuestros. En 2014 atendimos 128 casos y 245 detenidos, en 2015 tuvimos una baja a 32 casos con 126 personas detenidas, este año llevamos 34 casos y 60 personas detenidas.
Esto obedece a la creación de la unidad con un nuevo esquema de trabajo que implicaba no sólo estar en las asesorías de negociación para lograr una cantidad pagable del rescate y esperar a que llegara la víctima. Ahora estamos desarrollando toda la parte de investigación que impida incluso llegar a la situación del pago y generar la liberación mediante operativo.
Fuimos incrementando la capacidad de respuesta hasta llevarlo a juicio y tenemos 340 personas con sentencia. A partir de los dos grupos desintegrados hay una migración de diferentes grupos del Estado de México y Guerrero a Morelos. De cada tres secuestradores, dos venía de entidades como Estado de México, Guerrero, Sinaloa o Baja California. Pero nuestra capacidad de respuesta permite frenar su avance.
¿De qué países reciben capacitación?
—De Estados Unidos, El Salvador, Colombia, Alemania, Francia, Israel, España, pero también en México. Somos una unidad que está considerada dentro de las mejores, no lo digo yo, lo dice la coordinadora Nacional Antisecuestros, Patricia Bugarín, lo reconoce Renato Sales Heredia, pero también las propias víctimas destacan la labor.