Alrededor de mil soldados del ejército llegaron este domingo a Puerto Vallarta, Jalisco, para continuar la búsqueda de Jesús Alfredo Guzmán Salazar, uno de los hijos del narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán.
Fuentes federales consultadas expresaron su rechazo categórico a las versiones sobre la presunta liberación de Guzmán Salazar, luego de una supuesta negociación.
Añadieron que existen bases técnicas y científicas para descartar la posible liberación del hombre secuestrado hace una semana, junto con cinco acompañantes.
Los militares que llegaron a Puerto Vallarta vigilarán desde esa ciudad toda la costa jalisciense, y cuentan con información estratégica y tecnología de punta, además de que están en comunicación con el gobierno de Estados Unidos.
Asimismo, la misión castrense desplazada hacia el tercer puerto más importante de México estará en coordinación con la Marina, la Policía Federal y demás órganos de inteligencia y seguridad nacionales.