Culiacán, Sin.-Se ganó el apodo de “Splinter” no solo por aquel rostro ratonil y aguzado sino por la maestría en el manejo de las armas.
Más de ocho pistoleros no pudieron contra él al momento en que irrumpieron en el domicilio del fraccionamiento Hacienda del Valle. No se esperaban que “Splinter” respondiera tan certero a la agresión.
Los agujeros en las paredes son los rastros del tiroteo de esta mañana. Ya sabían dónde vivía y a qué hora llegaba de su turno de la Policía Municipal, pero no pudieron cazar al “sensei”.
Sin embargo, sus compañeros como Israel Ruiz Félix, Juan Antonio Saavedra Ortega y Josimar García Cruz no tuvieron la misma suerte de enfrentar a sus captores.
Apenas anoche al filo de las 12:00 horas un reporte anónimo avisaba que los cuerpos de los tres policías habían sido localizados a un costado de la carretera La Costerita. Dicho reporte resultó falso, confirmó esta mañana el subprocurador de la zona centro, Julio César Romanillo Montoya.
Los sicarios que llegaron por “Splinter” iban vestidos tipo militar y de color oscuro, tumbaron el portón de la cochera para penetrar los muros, pero desde adentro el comandante se defendía con su arma. No pusieron pasar el cerco de balas. La calle se volvió zona de guerra.
Una camioneta que estaba estacionada quedó perforada por los proyectiles, las paredes y cristales de las ventanas quedaron barridos. Una casa vecina fue alcanzada también en la fachada.
Al no poder franquear la casa, los pistoleros optaron por marcharse. Bastaron pocos minutos para que el comandante pidiera apoyo y que decenas de patrullas acudieran al sector, incluyendo un helicóptero que sobrevoló la zona.
“Splinter” resultó ileso del ataque. En las filas de la corporación todavía esperan noticias de los otros tres compañeros desaparecidos.