El Comité de Derechos Humanos de esta ciudad fronteriza (CDHNL) denunció a elementos de la policía estatal Fuerza Tamaulipas (FT) por la violación, tortura, detención arbitraria, amenazas y robo cometidos contra dos mujeres, una de ellas menor de edad.
De acuerdo con el testimonio que presentó la adolescente identificada como Rebeca, el pasado martes 24 de enero circulaba con su amiga Berenice en una camioneta Caliber, sobre la Carretera Nacional, a la altura del kilómetro 12, en Nuevo Laredo. De pronto, fueron interceptadas por los ocupantes de las unidades 907 y 908 de la mencionada corporación, que las obligaron a estacionarse.
Cuando el coche se detuvo, los policías cubiertos con pasamontañas y lentes negros las sacaron con violencia y las sometieron, colocándolas en el piso de la parte posterior de una de las patrullas.
Según el testimonio presentado ante el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, otro uniformado condujo la Caliber y enfilaron hacia el sur de la ciudad, rumbo a un lugar que identifican como Club Cimarrón. Luego se internaron por una brecha en dirección oriente, hacia el Río Bravo.
Los oficiales colocaron a Rebeca en la parte delantera de la patrulla y le ordenaron: “Sobres, culera, bájate el short”. Tras tocarla en sus partes íntimas, la desnudaron y le tomaron fotografías al cuerpo sin ropa, el rostro y sus tatuajes.
Los agentes –entre los que se encontraba una mujer–, le preguntaron para qué grupo criminal trabajaba y la amenazaron con entregarla a Los Golfos (Cartel del Golfo) en Ciudad Mier, donde les cortarían la cabeza. Uno de ellos le insinuó que quería tener relaciones con ella.
Cuando las mujeres los amenazaron con denunciarlos, uno de los uniformados retó a Rebeca, amenazándola con matarla, lo que provocó que ellas empezaran a llorar, según la denuncia.
En ese momento pasó sobre ellos un helicóptero, lo que ocasionó que los uniformados llevaran a las mujeres al interior de la patrulla 907, en espera de que la aeronave se alejara.
Luego, un elemento al que le decían El Comandante, pidió quedarse solo con la menor en la unidad. Le quitó la blusa, el brasier, la llamó “puta”, la recostó sobre el asiento y la penetró, violándola durante unos cinco minutos.
A las dos las golpearon con cachetadas y puntapiés en las costillas, mientras la mujer policía las golpeaba con una tabla de madera, preguntándoles quien era su comander, para quién trabajaba y amenazándolas con entregarlas al Cartel del Golfo.
Cuando terminó la violación, el abusador le anunció a Rebeca que la dejaría en Ciudad Mier, para que la mataran.
Luego de más de una hora de torturarlas, las colocaron en patrullas separadas y las condujeron por la avenida Reforma hasta el Hotel Cesar Palace, donde se hospedan los elementos de FT.
De ahí las transportaron a las instalaciones de Seguridad Pública, en la colonia La Fe, donde fueron remitidas a los separos bajo cargos de faltas al bando de Policía y buen gobierno.
El juez calificador desoyó la denuncia que Rebeca hizo de la violación y se abstuvo de darle protección, por ser menor. Se limitó a imponerles una multa de 300 pesos.
Según la denuncia que presentaron ante el Comité de Nuevo Laredo, las dos identificaron a El Comandante como un hombre de tez blanca, estatura alta y complexión regular. Otro de los agresores fue descrito como un hombre de tez morena, con un lunar o verruga bajo uno de los ojos.
Demandan atención de gobernador
El pasado viernes, el CDHNL entregó la respectiva denuncia de hechos al gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, y al secretario de Seguridad Pública del estado, vicealmirante Luis Felipe López Castro, con copia para el presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Tamaulipas, José Martín García y a la diputada Brenda Cárdenas.
En el escrito de queja 0015/2017 se especifican las consecuencias que la agresión dejó en Rebeca y Berenice:
“Ambas mujeres refieren que como consecuencia de estos hechos su estado emocional se ha alterado, al grado de no poder dormir. Han dejado de comer, sufren de pesadillas recordando las agresiones que fueron objeto, despertando angustiadas, y cada vez que observan una patrulla de la policía estatal FT comienzan a temblar y sienten mucho miedo, optando por no salir a la calle y permanecer en sus respectivos domicilios bajo candado”.
Así estudian las Cuazitas del CDN según sus papas andan en la escuela o trabajando honestamente sus santas princesitas, cuando en realidad están Halconeando para el Cartel del Noreste Los Zetas.
Video dedicado para CNDH en Nuevo Laredo Raymundo Ramos Defensor de este tipo de personas.
Así estudian las Cuazitas del CDN según sus papas andan en la escuela o trabajando honestamente sus santas princesitas, cuando en realidad están Halconeando para el Cartel del Noreste Los Zetas.
Video dedicado para CNDH en Nuevo Laredo Raymundo Ramos Defensor de este tipo de personas.
El organismo asentado en esta ciudad pide a las autoridades investigar los hechos, castigar a los responsables, proteger a las víctimas y a sus familias por las amenazas de muerte y darles asistencia jurídica, médica y sicológica, como lo establece la Ley de Atención a Víctimas.
También pide suspender a los agentes involucrados en la denuncia, mientras los agentes ministeriales investigan, y evitar que deserten, como ha ocurrido con anterioridad.
Incluso, solicita a la CEDH de Tamaulipas estar atenta a los operativos y detenciones que efectúa Fuerza Tamaulipas, para evitar que sus elementos cometan delitos y que observen pleno respeto a los derechos humanos de todos, particularmente de mujeres y menores de edad.