El analista en temas de narcotráfico Alberto Nájar, en entrevista vía telefónica, manifestó que el plazo que establecieron de un año para llevar a cabo el juicio en contra del Chapo es tiempo suficiente para llegar a una negociación.
"El gobierno de Estados Unidos tuvo que lograr una forma de darle espacio de llegar a un acuerdo. Yo no tengo claro hasta qué punto el Chapo vaya eventualmente a hablar o qué vaya a compartir, pero es evidente que existe interés desde que estaba aquí en México de llegar a un acuerdo con el gobierno de Estados Unidos."
"Yo creo que esto es justamente lo que hizo el juez, no tengo claro si fue a petición de la Fiscalía, pero no lo dudaría, fue dar un espacio para que justamente se diera este proceso de negociación, y yo supongo que también es para darse el tiempo para comprobar que los datos que este personaje les dé a conocer, realmente sean ciertos".
Expuso que lo mismo ocurrió con Osiel Cárdenas, jefe del Cártel del Golfo, quien también llegó a un acuerdo:
"Hubo un proceso largo para iniciar el juicio, y la información que él proporcionó permitió que se dieran golpes muy importantes a la estructura de la organización en Estados Unidos, y directamente provocó la ruptura de la organización, y fue cuando surgieron los Zetas. También ocurrió con el Vicentillo, que también llegó a un acuerdo y también él proporcionó información para capturar a otros líderes del narcotráfico. En este caso, el Chapo Guzmán tiene muchísima información no solamente por el tamaño de su grupo, sino porque es un narco viejo. No hay que olvidar que él tiene relación con autoridades desde hace mucho tiempo. Creo que el Azul era el único que lo superaba; ahora queda solo el Mayo. Yo supongo que en este plazo de un año él también va a jugar sus cartas y va a empezar a negociar."
AMARRE HILOS
Destacó que Estados Unidos no tiene completamente amarrados todos los hilos de este proceso porque hace días el procurador de México dijo que EUA no le ha encontrado un dólar al Chapo:
"Entonces tengo la impresión de que la Fiscalía habrá negociado esto para armar un mejor paquete. Y también tengo la impresión de que el hecho de que no tengan tantos elementos para presumir que atraparon al hombre más buscado después de Bin Laden y llevarlo a un superjuicio, le están aplicando presión, y por eso lo mantienen aislado. Al Chapo lo están metiendo a condiciones extremas para ablandarlo. Después del juicio, lo más probable es que vayan a caer otros líderes políticos en México. Hasta dónde y de qué tamaño, no lo sé. Yo esperaría que un par de exgobernadores estuvieran señalados, sobre todo los que están en la zona de influencia del Chapo. Yo creo que sería Durango, Sinaloa y Chihuahua".
Alberto Nájar mencionó que es muy posible que empiecen a caer algunos jefes de la organización y se dé un repunte de violencia:
"La captura del Licenciado ha ayudado a tranquilizar un poco. No hay que olvidar que hay un grupo Jalisco Nueva Generación que está creciendo muchísimo. La impresión que tengo es que al interior es posible que haya un efecto sorpresa a unos días de tranquilidad. El Mayo por supuesto que sale fortalecido porque ya no tiene un enemigo tan fuerte, pero también está la posibilidad de que otros grupos como Jalisco Nueva Generación traten de meterse en los territorios con más fuerza".
ESTRATEGIA
"El hecho de que el Chapo haya querido quedarse con el equipo de abogados que lleva hasta ahora es una estrategia de Guzmán Loera. Él no ha encontrado un abogado del tamaño que lo pueda defender. El argumento que tiene de los abogados es que está tan aislado que no tiene forma de contratar a nadie, pero él puede ordenar a los abogados buscar a otro. Creo que es una estrategia en la forma de decirle a Estados Unidos que no tiene todos los miles de millones que le quieren confiscar si no puede pagar un abogado".
El analista expuso que Guzmán Loera puede negociar una reducción de condena: "Estaría buscando que no sea perpetua. Es difícil que no le den menos de 20 años, pero siempre se puede porque él tiene muchísima información que puede servir para que tenga una condena que pueda ser lo más mínima posible. No sé cuánto tiempo vaya a estar ahí, pero sus delitos en Estados Unidos son equivalentes a muerte, pero el tratado de extradición conectado con México establece que no puede ser sentenciado a la pena de muerte, por ese lado ya la libró. Pero si pudieran sentenciarlo a 20 años, que para el Chapo sería cadena perpetua por la edad que tiene, puede negociar una pena más mínima, que dejen en paz a su esposa y sus gemelas, y que le permitan mantener la mayor cantidad de dinero posible; o sea, básicamente, tranquilidad para la familia".