“El Cheyo”, de 27 años de edad
La guerra en La Paz no se ha quedado ahí. Apenas la madrugada del 31 de agosto para cerrar al mes más violento –desde que inició el pleito por las plazas del narco en Baja California Sur el 31 de julio de 2014– un comando armado agredió a 4 jóvenes en Ciudad Constitución, Municipio de Comondú.Ante este sangriento escenario las autoridades “simplemente son espectadores, como te había dicho, solo recogen cuerpos, casquillos y andan viendo nomás en que pueden participar”, señaló a ZETA un miembro del Grupo de Coordinación de Seguridad Pública.
La agresión a balazos y con saldo de una persona muerta, ocurrió en el kilómetro 210 +500 y la calle Pedro María Anaya, de la colonia Renero de la carretera a Ciudad Constitución – Ciudad Insurgentes, a las afueras de la negociación conocida como “AutoZone”, esto a la 1 de la mañana del 31 de agosto. Todo indica que “el Cártel de Sinaloa pretendía tumbar al líder de plaza de narcomenudeo en Ciudad Constitución por parte del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), pero no solo eso, iniciaron una guerra para quedarse por la plaza de Comondú, parece que les enviaron sicarios de Sinaloa y los chingaron”, apuntó la fuente.
En el lugar fueron lesionados Rubén Omar Castañón Nicolat, alias “El Cheyo”, de 27 años de edad, presunto líder de plaza en Comondú, quien recibió impactos de bala en ambos muslos; Luis Alberto Muños Torres, alias “El Bogar”, de 27 años, ex policía municipal en Comondú y jefe de sicarios al servicio de “El Cheyo”, el cual fue atendido con una herida en brazo, tres en la parte del tórax, herida en músculo derecho de entrada y salida, según el diagnóstico preliminar se encuentra delicado con pronóstico reservado, ya que las lesiones ponen en riesgo la vida y tardan más de 60 días en sanar.
Este último, también es sobrino de Javier Torres Félix “El JT” y de Manuel Torres Félix “El M1” o “El Ondeado”, este último abatido por el Ejército en octubre de 2012. A “El Bogar” se le vinculó en agosto del 2015 por privación ilegal de la libertad a Bibiana Jiménez Davis “La Bibi”, presunta narcomenudista en el municipio de Loreto, así como a su hermano de nombre Eduardo, del mismo modo se le encontró en su poder una pistola Colt calibre 45, al momento del levantón se encontraba en activo ante la policía municipal de Comondú.
En el evento de la madrugada del 31 de agosto del presente año, fueron dos carros balaceados, un Honda Accord de color blanco y un automóvil KIA de color gris, donde quedó el cuerpo sin vida de Rafael Arroyo Acosta, de 25 años de edad, alias “El Murciélago” y quien era originario de Ciudad Constitución. Además se tiene conocimiento de una persona lesionada más, la cual huyó del lugar, sin embargo fue identificada como Juan López, alias “Juan Palapas”.
El ataque, según fuentes de inteligencia, fue dirigido por el Cártel de Sinaloa y tenían como objetivo abatir a “El Cheyo”, y así poderle arrancar el control de Comondú al CJNG; pero “como ya te había dicho, está confuso todo, hemos visto lo que ocurre a nivel nacional, desde el secuestro de los hijos de “El Chapo” (Joaquín Guzmán Loera), la ejecución del hijo de “El Mayo” (Ismael Zambada), pudiera apuntar hacia, que es lo primero que se nos viene, el levantón de los hijos de “El Chapo”, vienen y les pegan aquí para regresar el control, pero también hemos tenido presencia de Beltrán Leyva, y ahora con el regreso de los Arellano (Cártel Arellano Félix), solo sabemos que va a presentarse un reajuste y en eso tenemos que trabajar, no podemos dejar que se sigan matando y que siga la gente en medio”, afirmó la fuente militar.
Lo que según, “podría desencadenar una lucha por el control, no solo de La Paz, sino que vemos que ésta se ha esparcido a otros municipios en este reacomodo y que sigue dejando muertos, cada vez más a como inició la lucha encarnizada en La Paz”, finalizó.
Complicidad a secas
El mes de agosto del 2016 cerró con prácticamente un ejecutado por día (32 muertos al cierre de esta edición), además de un hombre que perdió la vida tras ser víctima de un “asalto” en el municipio de La Paz; la guerra por el control de la “plaza” que se esperaba que “durara unos días más, en lo que se terminan los de un lado para abrir paso a los nuevos de la plaza, ésta es la radiografía que tenemos, los enroques se han ido ajustando, con una violencia desmedida en este mes, pero todo apunta a que llegue esa calma que todos esperamos, yo vivo aquí y mi familia también, entonces estamos preocupados porque esto ya pare”, dijo la fuente policial a ZETA.
Pero en estos movimientos que se han registrado recientemente, ha quedado demostrada la apertura de paso para que haya este ajuste de cuentas entre ambos grupos; y es que se vio vulnerada de nuevo la seguridad, “se vio de quién es el absoluto control en un hecho sin precedente”, hecho en el cual quedó evidenciada hasta cierta medida la complicidad, la falta de coordinación y la intervención de fuerzas de seguridad o funcionarios públicos pues.
El viernes 26 de agosto se registró una intensa balacera, como dicen coloquialmente “en sus propias narices”, y es que un comando armado “rafagueó” una camioneta de color blanco a las afueras del centro de Reinserción Social (CERESO) de La Paz, allí quedó el cuerpo de Martín Cabrera, de 46 años de edad, además resultó lesionado Ramón Ángel Castro Castro, Alias “El Perro”, de 46 años de edad, quien perdió la vida días después en el hospital, producto de múltiples impactos de bala en el tórax; asimismo, se sabe de una persona más que los acompañaba, pero se desconoce el paradero.
Lo que queda de este atentado es que “iban por El Perro, las señas son muy claras, y él lo sabía, por eso al momento de ver al comando armado disparó en repetidas ocasiones, ya que se encontraron casquillos percutidos al interior así como armas cortas”, pero lo que aquí sale a relucir es que “era cincho que los iba a talonear. Pero lo que más preocupa es que hay abogados que los ponen que están trabajando con los contras o los mismos custodios”, lo cual deja mucho a desear, ya que es clara la colusión. Además algo que llamó mucho la atención es que la balacera se registró frente al CERESO, pero también frente al Juzgado Primero del Ramo Penal, a escasos metros de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), del Nuevo Sistema de Justicia Penal, del Centro de Control, Comando, Comunicación y Computo (C4) y de la propia Procuraduría General de la República (PGR), nadie pudo hacer nada para evitar el atentado.
Pero esta coparticipación en la que levantan, ponen y “dan pitazos”, no es la primera vez, anteriormente se han registrado muchos casos que son del orden público, “o al menos nosotros sabemos dentro de las mismas corporaciones quiénes son, y no tiene caso que te los mencione, me expongo y te expones, porque son gente protegida, algunos ya no son funcionarios, pero te puedo decir que operan aún por fuera”, refirió la fuente policial.
Pero hablando de colusión de funcionarios públicos, esto fue algo que se dio mucho en la administración del panista, Marcos Covarrubias Villaseñor, que “quizá fue a sus espaldas, pero cuando quiso cambiarlos fue demasiado tarde, incluso el propio Álvaro de la Peña tuvo que dejar la Secretaría de seguridad Pública porque fue demasiado y ya estaba muy podrida la Policía Estatal Acreditable que dejó mucho a desear”, algunos de los casos que han llamado la atención y que apuntan directamente a la administración pasada, el 23 de agosto fue ejecutado en su vivienda en Villas del encanto en la Paz, Carlos Miguel Calderón Hinojosa, alias “El Virolo”, de 39 años de edad, y que perteneció al equipo de gira del ex gobernador panista, se le vinculó en su momento con células del crimen organizado.
Miguel Ayala, alias El Zorro_ Raimundo Flores, ex Director de CERESO de La Paz_ y Narciso Cota, alias EL CHICHO, este ultimo ejecutado en la colonia La Fuente_ el ultimo fue escolta con MACOVI
También se vinculó con células del crimen organizado a Narciso Cota, alias “El Chicho”, ejecutado apenas el pasado lunes 29 de agosto en Circuito Bledales casi esquina con Del Río, a bordo de un auto Toyota Corolla de modelo reciente, quien se le vio también operando en la estructura cercana al ex gobernador Covarrubias (véase foto), allí en una foto en redes sociales se le ve parado junto a una camioneta de la campaña, le acompañan de izquierda a derecha, Miguel Ayala, alias “El Zorro”, quien fungió como comandante de la Policía Estatal en la anterior administración, y que en repetidas ocasiones fue señalado en notas ya publicadas y en redes sociales, como uno de lo que participó “poniendo malandros”, así fue calificado en las últimas publicaciones; sin embargo, enseguida, en la foto, se ve a Raimundo Flores, ex Director de CERESO de La Paz, el cual fue muy mencionado tras la ejecución de su chofer, Misael Zarim Cosío Delgado, el cual ya había sido avisado por comandos armados al ser baleado uno de sus negocios en la colonia Indeco en mayo del 2015, sin embargo fue hasta el 26 de septiembre del mismo año cuando le dieron muerte en Toronja muy cerca del Juzgado Primero de la Penal de primera instancia.
Lo que queda claro es que a la llegada de la administración de Carlos Mendoza Davis, heredó corporaciones marcadas y con poca credibilidad, lo cual ha costado trabajo poder levantar “porque la gente te ve en la calle y no te cree, y eso nos ha costado a todos, aunque te puedo decir que aún hay policías con procedimientos por colaboraciones con el narco, y ésa es la realidad, se van a ir uno pero quedan otros”, expresó.
Precisamente a la llegada de la administración 13 policías estatales fueron dados de baja en diciembre del 2015, ya con Álvaro de la Peña Angulo como Secretario General de Gobierno, quien se ha desempeñado anteriormente en la Dirección General de Supervisión de la Policía Federal, y que en Baja California Sur lo ha sabido aplicar hasta cierta medida; aunque ha habido bajas, existen aún policías en funciones que han sido señalados y que se encuentran bajo investigación, “no podría decirte que son dos o tres, cuando están a la vista y son en flagrancia por supuesto que se actúa de inmediato y cuando hay una responsabilidad se hace de inmediato, o cuando hay una denuncia dirigida a la persona que se le está señalando algún indicio o alguna señalización directa”, externó el servidor público.
Por ello se lleva a cabo a la par de la investigación, un estudio socioeconómico en el cual “le estamos dando un seguimiento muy puntual a la gente que trabaja en estas áreas, para ver cómo vive, si corresponde su salario al estilo de vida que lleva, es bien importante esa parte”, apuntó de la Peña Angulo.
Pero lo que resalta de la nueva administración, es que no solo se investiga a las corporaciones señaladas, sino que “se está haciendo una investigación en general sobre todos los funcionarios que estamos en la seguridad pública del estado, no nada más es el tema de la estatal, es todas las áreas operativas, las fuerzas federales, las fuerzas armadas, todas las fuerzas que trabajamos en el sistema operativo, en la seguridad pública y en la procuración de justicia, se está enfatizando en el tema de asuntos internos, en las investigaciones en el interior y sobre todo enfatizando en el tema de control y confianza”, para garantizar cuerpos de seguridad libres de corrupción.
Fuego amigo contra el Procurador
“Todo parece indicar que se trata de una guerra interna en las corporaciones de seguridad”, dijo un miembro del Grupo de Coordinación de Seguridad Pública, al localizarse al menos 13 pintas en distintos puntos de la ciudad de La Paz, plasmadas en bardad de domicilios, negocios, escuelas y vehículos, “sin embargo te quiero comentar que en primera instancia creíamos que era netamente político el asunto, pero al revisar bien los mensajes, determinamos que a alguien le estorbaba Palemón (Procurador General de Justicia de Baja California Sur), o no los está dejando trabajar o hay algo ahí escondido”, expuso.
Y es que en la mayoría de mensajes hacen referencia al Gobernador del Estado, Carlos Mendoza Davis; donde señalan que:
“Otro más, 10 más o 15 más, cuántos ocupas para destituir a Palemón, Sr. Gobernador”.
seguridad BCS 214
Los mensajes van dirigidos al Gobernador pero solicitando la destitución de Erasmo Palemón Alamilla Villeda, sin embargo, también por la forma de operar los creadores de los mensajes sabían dónde y cómo realizarlos, como si contaran con alguna protección o insignia, con expresiones muy largas, incluso algunas con más de 10 metros de longitud y en lugares a la vista, lo que lleva a pensar que alguien aprovechó la ocasión para causarle ruido al Procurador y hacer de esto un “fuego amigo”.
Al respecto, Alamilla Villeda expuso: “Me manifiesto muy respetuoso de todas las manifestaciones que surjan como servidor público, estoy muy consciente que la ciudadanía puede tener diversas manifestaciones y me manifiesto muy respetuoso. ¡No sé! Yo no quiero hacer especulaciones, no quiero caer en el terreno de las especulación, y soy muy respetuoso, insisto de las manifestaciones que surge, cualquier servidor público que se precie de serlo, tendrá que entender que en su trabajo estará en el escrutinio público, y el mío lo está, soy muy respetuoso de lo que se diga o se haga, nosotros estamos trabajando de manera comprometida, seria, profesional”, reitero el servidor público.
Además, funcionario presumió su labor argumentando que el 55 por ciento de las órdenes de aprehensión se han completado, del mismo modo se han recuperado el 85 por ciento de automóviles robados, y otras cifras que mantiene la PGJE. Por lo tanto su renuncia no es una acción probable.
“No tengo por qué, a once meses que yo recibí la procuraduría que no estaba antes, no había organización, no había un rezago brutal de averiguaciones previas, los objetos estaban tirados en el piso, no había un orden una cohesión, ahora ya la hay, un instituto interdisciplinario de ciencias penales que tiene cursos para preparar debidamente a sus ministerios, a los agentes de policía, los peritos, estamos completando el 55 por ciento de las órdenes de aprehensión que liberan los jueces, estamos recuperando más del 85 por ciento de los vehículos robados”, arguyó.
Aunque los señalamientos hacia el procurador en los últimos meses han sido fuertes derivado del alto índice de ejecuciones, el funcionario asegura que en un lapso no muy largo la institución se ubicará entre las diez mejores procuradurías del país, esto dicho, considerando que hasta el primero de septiembre, cierre de esta edición se registraron ejecuciones por el crimen organizado.
“Que tiende a ser, en un tiempo no muy lejano, de las diez mejores de la república, esta procuraduría no se veía hace once meses, ustedes como reporteros, que su trabajo me merece respeto, no veo que en la hemeroteca de la ciudad de por qué había ese rezago, ese desorden, porque había servidores públicos que, estando en la procuraduría, tenían sus despachos y desde ahí litigaban todo eso se ha ido acabando, ésa es la procuraduría que tenemos ahora y es la que tenemos que buscar y tenemos que hacer que siga funcionando”, refirió Erasmo Palemón.
Otra de las líneas de investigación, apunta al crimen organizado, precisamente por lo mencionado por el servidor público, abogados litigantes y también funcionarios públicos, con influencias en el crimen organizado, retomando el caso ocurrido en la ejecución de “El Perro”, las fuentes de investigación señalan que pudiera tratarse de los custodios, o bien, de abogados al servicio de “la maña”, como dicen algunos agentes de seguridad.
Los últimos ataques a narcomenudistas
Desde el 26 de agosto la cifra de ejecutados sigue a la alza, 10 han sido los hechos de sangre al cierre de esta edición, 10 en siete días, lo que da como promedio de más de 1.4 ejecutados por día, cifra preocupante para un estado donde se tenía prácticamente cero; lo que preocupa a los ciudadanos y a las propias autoridades, porque ha quedado demostrado que no hay mucho por hacer, simplemente esperar a que termine la limpia, tal fue el caso de la ejecución frente al CERESO de La Paz, el corazón de la seguridad de la capital, sin embargo allí perdió la vida una persona y otra más resultó lesionada, y murió días después debido a los múltiples impactos de bala, se trata de Ramón Ángel Castro “El Perro” y Martín Cabrera, hechos ocurridos la tarde del 26 de agosto.
Ese mismo día por la noche, fue ejecutado a balazos Carlos Leyva, alias “El Charly”, en las calles de Toronja y Tamarindo de la colonia Indeco en La Paz.
El 27 de agosto, a la altura de las calles Madero entre Sonora y Sinaloa de la colonia Pueblo nuevo, fue abatido a balazos Saúl Peña, alias “El Pera”, de 27 años; ese mismo día por la noche y en el Municipio de Los Cabos, en la calle Mar Blanco de la colonia Miramar perdió la vida Manuel Gallardo, de 17 años de edad, en este caso según los datos brindados por vecinos del lugar, señalan que el joven se encontraba a bordo de un vehículo, mismo al que le prendieron fuego con él en su interior, posteriormente la víctima salió corriendo para ingresar a una vivienda envuelto en llamas, allí se prendió la casa, sin embargo fuentes policiales afirmaron que las quemaduras fueron en su mayoría pos-mórtem, ya que tenía un tiro de gracia.
Para el día lunes 29 de agosto, Narciso Cota, alias “El Chicho”, fue ejecutado a balazos en la colonia La Fuente en el Municipio de La Paz, en las calles de Circuito Bledales entre Cascada y del Lago, una zona muy oscura, allí fue abatido a balazos mientras se encontraba a bordo de un automóvil tipo Toyota Corolla de modelo reciente, esta persona se desempeñó como Comandante de la Policía Estatal en la administración de Marcos Covarrubias, causó baja.
La madrugada del 31 de agosto en el municipio de Comondú perdió la vida Rafael Arroyo Acosta, de 25 años de edad, alias “El Murciélago”, presunto sicario al servicio de “El Cheyo” en aquella comunidad; esa misma tarde en La Paz fue ejecutado a tiros “El Leñador”, de nombre César Sepúlveda, en las calles de Popocatépetl casi esquina con Aquiles Serdán de la colonia Balandra Puesta del Sol, según testigos “pasó una camioneta dorada, cuatro puertas, antes de que pasara esto, se vio a personas armadas, creímos que eran policías”, dijo una testigo a agentes militares.
Y en las calles de Constitución entre México y Durango, en el interior de un negocio denominado “Abarrotes América” la persona fallecida era conocida como Ricardo de Jesús Morales Siqueiros “El Masa”, el cual vestía camisa roja y pantalón de mezclilla, sus restos quedaron en el interior del negocio; otro más por la noche, en el Bordo de contención y Colosio, cercano al local de eventos “La Vianda”, se hablaba de un guardia de seguridad, sin embargo, al cierre de edición permanecía en calidad de desconocido.