De por lo menos 30 balazos le quitaron la vida a un hombre a la orilla de la carretera que conduce a la sindicatura de El Tamarindo, y que está pasando El Limón de los Ramos.
El cuerpo yacía tirado bocabajo, tenía las manos atadas a la espalda, además de que estaba esposado de los pies.
Por la suciedad de la ropa, parecía que a la víctima la arrastraron desde la unidad en donde la llevaban hasta el sitio al lado del canal, en donde le dieron muerte.
Como características, vestía pantalón de mezclilla azul (el cual estaba roto de varias parte), portaba una playera verde limón, un cinto con muchos ojillos, tenis negros o café con franjas amarillas.
ACRIBILLADO
A la víctima por lo menos se le apreciaban 21 disparos, los que habían entrado por su brazo izquierdo, pero también se le veían en la espalda, los cuales le rompieron la playera. El cadáver estaba cerca de una bomba de agua y a unos cuantos metros de un cenotafio.
EVIDENCIAS
En el sitio en donde fue dejado el cuerpo se localizaron alrededor de 30 casquillos de un arma 9 milímetros y como alrededor de 60 de cuerno de chivo, pero estos últimos se pudo constatar que ya eran viejos y que no tenían nada que ver con el crimen. Una de las hipótesis es que en días anteriores alguien llegó a dispar con el rifle de alto poder y allí se quedaron los cascajos y, por coincidencia, quizá el cadáver fue dejado cerca de los mismos.
El occiso no llevaba ninguna identificación con la que se pudiera reconocer. Este fue llevado al Servicio Médico Forense, en donde permanecerá durante algunos días a la espera de que lo identifiquen; además, allí se le realizarán las diligencias de ley.
