Las comunidades de Tacopaco y León de la Sierra fueron invadidas por un grupo de gatilleros
Choix, Sinaloa.- Son tres años ya de que un grupo numeroso de empistolados sembrara el terror en los límites de Sinaloa; fue en la zona serrana del municipio de Choix, en dos humildes comunidades denominadas Tacopaco y León de la Sierra, las cuales colindan al noreste con Chihuahua.
RUIDOS DE TERROR.
Era 16 de septiembre del 2013. Esa mañana se vio a un grupo de hombres con vestimentas oscuras, encapuchados y que portaban armas cortas y largas, llegar al poblado de León de la Sierra localizado en la serranía de Choix.
Para arribar hasta ahí el único acceso era por medio de lanchas, por lo que los gatilleros cruzaron a bordo de estas el vaso de la presa Luis Donaldo Colosio y una vez ahí se dispusieron a incendiar una casa destruyéndola casi en su totalidad.
La persona que la habitaba salió corriendo debido a los disparos que estos individuos le realizaban a escasos metros, con la finalidad de privarlo de la vida, pero el hombre corrió hacia los cerros y aprovechó la vegetación para ocultarse y ponerse a salvo de los agresores.
Debido a que los grupos armados llegaban y arrasaban con las casas y vehículos, la gente del lugar prefirió salirse que arriesgar a sus familias. Muchos se refugiaron en los cerros.
QUEMAZÓN DE CASAS.
Un vez cometido el primer ataque, el grupo de desconocidos se dirigió a Tacopaco, un poblado pequeño con pocas familias. Cuando llegaron al lugar comenzaron a disparar generando caos y golpeando a algunos de los habitantes para infundirles temor. En esa comunidad ‘levantaron’ a una persona llamada Saúl Salmerón, de 57 años, y quemaron 3 viviendas. Niños, mujeres y ancianos se desplazaron por miedo, algunos se fueron al monte y a los cerros.
Los niños fueron los primeros en ser sacados de las comunidades afectadas y rápidamente atendidos por los cuerpos policiacos. La noche del 17 de septiembre del 2013.
De los 50 habitantes, sólo 14 decidieron dejar definitivamente el lugar y sus pertenencias para salvar la vida. Buscaron apoyo y refugio en las autoridades quienes a la 1 de la tarde fueron alertados de la situación tan grave que estaba sucediendo.
Unidades de la Policía Ministerial, Municipal y personal del Ejército se abocaron al lugar para brindar protección a los afectados. En pangas llegaron y su presencia tranquilizó un poco a los desalojados. Se organizó el operativo para trasladar a un lugar seguro a las personas. A tres años, se dice que esas comunidades casi quedaron completamente abandonadas.
Personal del Ejército Mexicano y agentes municipales y ministeriales de El Fuerte y Choix fueron hasta las comunidades para ayudar a los habitantes que fueron agredidos.