Rosario, Sinaloa.- Con un nudo en la garganta que en ocasiones los hacía detener el habla para no soltar el llanto, vecinos de la zona serrana denunciaron a los medios de comunicación atropellos por parte de un grupo armado que ha llegado incluso a asesinar a habitantes del lugar. Algunos han recibido golpes, amenazas y robo de todas sus pertenencias.
Señalan que son más de 100 familias las que han dejado sus hogares por miedo de perder la vida ante las amenazas que han recibido. Entre las comunidades afectadas esta Buena Vista, Tecomatillo, Corral de Piedra, las pilas de Estancia y Agua Sarca, asentados en la sierra de Rosario.
Los afectados, que se dirigieron a las instalaciones de Seguridad Pública Municipal, relataron que ayer, usando una máquina tumbaron una casa completa en la comunidad de Buena Vista, y algunas otras casas de la comunidad de Corral de Piedra fueron quemadas el jueves de esta semana.
Gran miedo e impotencia.
Con gran dolor e impotencia por no poder hacer nada, comentaron que en las comunidades de Agua Zarca y Las Pilas se ha quedado completamente sola. “En Agua Zarca y Las Pilas la gente fue amenazada, y como no los dejaban salir por la carretera, la gente dejó todo y corrió por el monte. Dejaron todo y ya después llegaron y les robaron. Las comunidades antes mencionadas están solas y si hay gente, es de ellos”, dijo uno de los afectados.
Los desplazados dijeron que ese era el principal objetivo de los maleantes que se pasean con cuernos de chivo y R-15 por las comunidades como si nada, amedrentan a la gente para que se salga y así poder quedarse con todo, incluido su ganado, que ha crecido con mucho sacrificio, pero ellos solo llegan y lo toman, e incluso aseguran que ya se han dado asesinatos.
En la comunidad de Corral de Piedra señalaron que también se ha ido quedando sola, al grado que de casi 60 casas, solo quedan 20 habitadas. Le sigue Tecomatillo, que es otra que ha quedado desolada; Buena Vista, con aproximadamente cuatro familias que también han dejado su hogar.
Recalcaron que la poca gente que queda no puede seguir con su vida cotidiana pues si salen al campo o a los potreros a ver sus animales son golpeados por los agresores. “Si salen al monte, los cuerean”, dijo otro de los afectados.
Aunque su sueño es que se acabara esa gavilla, lo que ahorita piden es que los apoye el gobierno para que los escolte, sacar su ganado y venderlo, que las autoridades trabajen para que vuelva la paz a esta zona de la sierra. Dicen que han acudido al Ministerio Público y al Ejército en Mazatlán, pero no les han hecho caso, por este motivo, se sienten muy desesperados.
Las autoridades de Seguridad Pública Municipal informaron que se solicitará apoyo a la Policía Ministerial a Culiacán y a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, para darle atención a las denuncias lo antes posible.
Sierra violenta.
El año pasado, una ola de asesinatos y enfrentamientos entre dos grupos armados y en una ocasión con el Ejército Mexicano cimbraron ese brazo de la sierra que ocasionó el primer éxodo de personas, en su mayoría de Corral de Piedra, muchas de las cuales decidieron regresar después de una aparente calma.