Ocupados como nunca antes con las insensateces de Donald Trump, hemos dejado de lado el reportar la lucha intestina entre narcotraficantes que azota nuestro país desde hace una década.
La víspera, desde Culiacán, Sinaloa, el titular de la Secretaria de la Defensa Nacional, General Salvador Cienfuegos, confirmó que el Cártel de Sinaloa pelea el mando de la organización, y asegura que los hechos violentos recientes que se han registrado en la entidad son un problema entre ellos.
Y aunque el General tiene razón, se le olvida que en medio de esas agresiones está la ciudadanía. Estos grupos delincuenciales no se matan entre sí en lugares alejados sino en zonas urbanas y concurridas. Pero pongámonos al día de lo que pasa al interior del aún considerado cartel más poderoso del país para entender mejor lo que en las próximas semanas sucederá.
La guerra que se vive en Sinaloa tuvo su origen porque Aureliano Guzmán Loera, “El Guano”, hermano de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y los hijos de éste ultimo, rompieron acuerdos, levantaron narcos y pretendieron tomar el control del cártel que aún encabeza Ismael “El Mayo” Zambada.
Según los análisis del Gobierno Federal, no es creíble la versión de los hijos de “El Chapo”, quienes a través de una carta manifestaron que Dámaso López, "El Licenciado", ex jefe de sicarios de "El Chapo", y quien ayudó a escapar al capo del penal de Puente Grande, en Jalisco, en 2001, haya pretendido atentar contra “El Mayo”.
Se sabe que “El Licenciado” es incondicional de “El Mayo” y solo actúa bajo sus órdenes; la versión más creíble hasta el momento es que “El Licenciado” y su hijo, “El Mini Lic”, están en una abierta disputa y buscan acabar con “El Guano” y los hijos de “El Chapo”, pleito en el que no ha intervenido, aún, Zambada.
Hace unos años Dámaso y su hijo del mismo nombre, se aliaron con César Carrillo, hijo del extinto líder del Cártel de Juárez, Amado Carrillo, “El Señor de los Cielos”, familia, ésta última, a la que “El Chapo” comenzó a matar desde hace años por rencillas con Vicente Carrillo, “El Viceroy”.
La guerra contra “El Guano” y “Los Chapitos” se da en varios frentes; por un lado confrontan al cártel de los “Beltrán Leyva” liderados por Fausto Isidro Meza, “El Chapo Isidro”, y por el otro a "Los Dámasos" que controlan varios grupos, entre ellos, “Los Montana”. Mientras que “Los Chapitos” tienen sus células, como “Los Chimalis”, encabezados por Ivan Guzmán Salazar, “El Chapito”.
Versiones aseguran que “El Guano” comenzó a cobrar el derecho de piso, no solo en diversas localidades de Sinaloa, sino también en la sierra, además de extorsionar, pretendiendo tomar el control del estado y otras zonas del país, lo que provocó el rompimiento.
Y por increíble que parezca, una fuente al interior del gabinete de seguridad nos dice que aunque hay preocupación por lo que pasa en Sinaloa, no amerita prender focos rojos ya que la violencia que se ha presentado, y se avecina, durará en lo que se define la cabeza del Cártel de Sinaloa. Algo interno y sin importancia pues.